¿Cómo se hace un anilingus? Antes de nada, vamos a proceder a aclarar qué es eso del anilingus y el beso negro, porque las opiniones respecto al concepto son muy diversas y en muchas ocasiones confusas.
Hay quien piensa que hacer un beso negro es defecar en la cara o cuerpo de la pareja, pero no. La práctica del beso negro hace referencia a practicar sexo oral en el ano. Vamos, que no tiene nada que ver una cosa con la otra.
Normalmente suele haber un miedo exacerbado ante la estimulación anal dado que ésta se relaciona con una la orientación sexual distinta a la heterosexual (como si eso fuese malo), cuando en realidad las prácticas sexuales no determinan la orientación sexual. Todo el mundo ha de sentirse libre de realizar las prácticas sexuales que le gusten, siempre y cuando éstas sean sanas, éticas y legales. Así que, si te apetece probar la estimulación oral del ano, este es tu momento. Coge papel y lápiz que te explico cómo has de proceder.
Postura
La mejor postura para hacer un anilingus es aquella en la que la persona que va a recibir la estimulación se coloca a cuatro patas y la otra detrás. De esta manera el ano queda totalmente despejado y es mucho más cómodo acceder a él. También puedes probar a realizar un 69, porque aunque ésta no sea tan cómoda, hay personas a las que les resulta muy excitante ver a su pareja desde una perspectiva totalmente distinta a lo habitual.
Procedimiento
Está claro que cada persona tiene unos gustos muy concretos, pero como siempre digo, es mucho mejor tener un abanico amplio de posibilidades placenteras donde poder elegir, que no tener nada e ir a ciegas. Aún así, lo mejor es asegurarse de que lo que se está haciendo gusta, y si no, lo suyo es preguntar antes de hacerlo.
Yo te voy a proponer la idea de lamer la zona anal e intercalar la estimulación oral con la introducción de uno o dos dedos en el recto lentamente, ya que si gusta, puede llegar a ser algo muy placentero.
Precauciones
Higiene
La higiene para este proceso es algo muy importante. Ésta ha de ser reciente ya que el ano es portador de bacterias, virus o parásitos. Si lo vamos a poner en contacto con la boca, lo mejor es tenerlo lo más limpio posible. Con un poco de agua y jabón durante la ducha es más que suficiente.
Depilación
Si te gusta depilar tus genitales y nalgas por estética o comodidad, tienes que tener en cuenta que no es bueno hacerlo justo antes de la práctica. La depilación puede ocasionar micro cortes por los que se pueden transmitir infecciones, y ya no sólo eso, si no que, de la fricción, la zona se puede irritar.
No lavarse los dientes, pasarse hilo dental justo antes de la práctica
Esto es por el mismo motivo que el anterior, el cepillo o el hilo dental pueden producir heridas por las que se pueden transmitir infecciones.
No hacerlo si en la zona hay heridas
Llagas, cortes y lo que sea que sangre, ya que, como comentaba en los dos puntos anteriores, se pueden transmitir infecciones.
Orden de estimulación
Estimular los genitales después de haber estimulado el ano no es lo más recomendable. Hacer esto es servir de puente a toda la suciedad que se acumula en la zona, aunque tú no la veas, y propiciar infecciones y desórdenes en el Ph genital, en especial en el de las mujeres. Si lo haces del revés, primero los genitales y luego el ano, no pasa nada, es en el orden contrario donde puedes tener problemas.
Utiliza una barrera dental
O en su defecto un preservativo recortado en forma de rectángulo. Es muy importante realizar la práctica de forma segura, en especial si ésta se realiza sin una pareja estable con la que ya tengas asegurado que no tiene ninguna ITS (para esto, ambos os habéis tenido que realizar análisis de sangre un año atrás y haber mantenido relaciones sexuales exclusivamente entre vosotros).
Optativas
Si la idea de realizar el anilingus con la boca no os convence mucho, siempre podéis usar alternativas. Los juguetes eróticos tienen una amplia variedad de opciones placenteras. Estimular el ano con juguetes que simulen todo el proceso también puede ser muy excitante. Por ejemplo, utilizar un lubricante mientras se pasea el dedo por el ano y luego un dildo finito para introducirlo dentro, puede ser una buena opción. Pero para gustos los colores.
Es tu momento, ¡a disfrutar!