Muchas prácticas sexuales se terminan haciendo famosas o llamativas porque aparecen en algún libro erótico conocido, las descubrimos en escenas del cine porno o vete tú a saber. Todas, al final, son opciones que normalmente utilizamos como referente pensando que la realidad se asemeja a lo que realmente es fantasía. Claro, luego las frustraciones y los ‘madresmías’ aparecen hasta debajo de las piedras porque no tenemos en cuenta que en los libros y las películas la vida siempre es maravillosa.
Algo así pasa con la doble penetración, práctica compleja que en la ficción se disfruta muchísimo, siendo además rápida y fácil de realizar. Para algunas personas ésta es su fantasía fetiche o incluso práctica habitual, para otras ésta misma es una aberración, pero ¿qué es la doble penetración? ¿Realmente sabemos de qué hablamos cuando usamos el concepto? Y lo más importante ¿sabemos o sabríamos realizarla bien? ¿Es tan placentera como parece? Son demasiadas preguntas. Vamos a desengranar el tema por pasos.
¿Qué entendemos por doble penetración?
Por doble penetración podemos entender hasta tres cosas distintas:
- PRÁCTICA 1: Penetrar dos orificios del cuerpo a la vez, como por ejemplo, la vagina y el ano, el ano y la boca o la vagina y la boca
- PRÁCTICA 2: Penetrar con el pene, dedos u objeto el mismo orificio a la vez
- PRÁCTICA 3: Penetrar cualquier orificio del cuerpo entre dos personas de forma mutua con un mismo dildo
¿Cómo podemos realizar cualquiera de ellas de forma que no corramos ningún riesgo?
Las pautas para llevar a cabo dichas penetraciones dependerán un poco de los orificios a penetrar. Por ejemplo, si lo que queremos es introducir un juguete o el mismo pene en el ano, esto, como bien sabemos, no podemos hacerlo de golpe porque el ano es una parte del cuerpo que no está hecha para que entren cosas si no para que salgan, por lo que no produce lubricación por sí misma; hay que utilizar lubricación artificial. En ese caso, lo recomendable es estimular progresivamente el ano e ir dilatando poco a poco la zona, acariciando de forma placentera otras zonas del cuerpo para compensar si esto nos produce dolor. Por ejemplo, el clítoris en caso de ser mujer o el pene en caso de ser hombre. Una vez la zona anal esté completamente dilatada y se pueda penetrar cómodamente sintiendo placer, podemos proceder a penetrar otro orificio del cuerpo; si imaginamos que es la vagina, tendremos que tener en cuenta que en ese caso el ángulo de penetración sea el adecuado para no obtener dolor de la práctica. Para saber si el ángulo de penetración es el adecuado lo tenemos muy fácil: basta con que no nos duela y sintamos placer.
COSAS IMPORTANTES A TENER EN CUENTA:
- No podemos penetrar las zonas a lo bestia porque se supone que lo que queremos conseguir es placer, no dolor.
- Tenemos que utilizar preservativo siempre, en especial si la práctica se da en una relación sexual esporádica.
- No pasar de penetrar el ano a penetrar la vagina sin una higiene previa puesto que las bacterias del ano y las de la vagina no se llevan muy bien y hay riesgo de contraer infecciones.
- Utilizar lubricante con base de agua para la vagina (recrea a la lubricación natural de la vagina) y con base de silicona para el ano, ya que creará una capa de impermeabilidad que impedirá que el lubricante se absorba fácilmente como ocurre con los lubricantes con base de agua. Como ya hemos dicho antes, el ano no lubrica por sí mismo y hace falta más tiempo para dilatarlo y penetrarlo. Si este proceso se realiza con un lubricante que se absorbe rápidamente hay que echar más, por lo tanto gastamos más lubricante y hay riesgo de irritación en la zona.
¿Es una práctica que puede realizar todo el mundo?
Si la pareja en cuestión tiene ganas y motivación, sí, aunque han de recordar que lo más importante es ir poco a poco y acostumbrarse a la práctica de forma paulatina. Si por el contrario, no hay apetencia o se presentan dificultades para dilatar las zonas, no hay por qué sentirse obligado/a a experimentar algo que no se desea, ni sentir frustración porque no se pueda realizar.
¿Hay algún producto que pueda ayudar a su realización?
Como hemos dicho antes, tenemos los lubricantes con base de agua y lubricantes con base de silicona, como por ejemplo estos de la marca Shunga.
Hay productos, como este dildo doble de la marca Pipedream para realizar una doble penetración en vagina-ano en solitario.
Por otra parte, en el mercado también podemos encontrar juguetes como TIANI 2 de LELO, o WE VIVE 4 plus que se pueden usar mientras se practica el coito, introduciendo uno de sus extremos (el más fino) dentro de la vagina y el más grueso en la vulva cerca del clítoris).
O estimuladores de próstata para utilizar mientras se practica la penetración, como HUGO de LELO.
Y por último, también tenemos disponible el dildo doble de la marca Marc Dorcel para realizar una doble penetración anal o vaginal mutua.